Seguidores

jueves, 30 de diciembre de 2010

Imaginemos puntos de vista.


Imaginemos a dos personas, frente a frente, sentadas, de pie, recostadas, como más os guste.
Están situadas en un lugar apacible, llano.
Una de ellas, ve una preciosa bahía, con su playa, sus acantilados, un faro, la mar abierta en el horizonte, preciosos veleros navegando, gente nadando y surfeando, delfines saltando, etc… Puede escuchar el ruido del mar, oler el salitre. Seguro que podéis añadir más detalles.
La otra persona, en cambio, ve a espaldas de la primera, un precioso valle, con un bosque, con sus campos de cultivo, sus molinos, y al fondo un agreste macizo montañoso, con sus cumbres nevadas. Puede escuchar el aullido del lobo, el balar de las ovejas, el vuelo de un águila, oler el heno recién cortado.

Cada una de esas personas, de forma inamovible, ve únicamente su paisaje. Está enamorada de lo que ve, de lo que oye, de la maravillosa sensación que le invade, al contemplar aquello que más le gusta.

Tras un tiempo indeterminado, comienzan a hablar sobre lo que ve cada uno. Al principio, la conversación es educada. Cada uno describe aquello que le apasiona. Pero poco a poco, intentan convencer al otro de que se gire y se entrega al paisaje que no ve, que no conoce.
Y de conversación, pasa a disputa y de ahí a un violento enfrentamiento, para hacerse con un triunfo absurdo.

Seguro que pensaríamos, que están locos, que no pueden hacer mayor tontería. Al fin y al cabo, cada una de estas dos personas, tiene un visión de 180º, y ambas se complementan. Incluso dentro de esos 180º, tienen una visión perfecta de 90º, los otros, que se pierden en los lados, tampoco son tan perfectos.

Bueno, pues este ejemplo absurdo, es el que más se encuentra uno, cuando lee lo que se escribe en el mundo cibernético del BDSM.

Creo, que tos estaremos de acuerdo, que el BDSM, abarca multitud de prácticas, por decirlo de alguna manera técnicas. En ellas, si hay cuestiones de seguridad, de salud física o mental que son inquebrantables.
Pero, tiene otro aspecto importantísimo, las sensaciones, emociones, sentimientos que nos provoca a cada uno. Y todo eso, es personal e intransferible. Nadie, puede ponerse en el lugar del otro.

Lo que si se puede hacer, es escuchar, ver, observar y quizás hasta intentar entender a otro. Y lo que si debería ser obligatorio, es RESPETAR, no creernos en posesión de la verdad absoluta, sobre como se tiene que sentir o ser otra persona.
Intentar ayudar a que conozca los 360º de posibilidades que nos ofrece, pero nunca intentar imponer mis limitados 180º de visión, si soy de los que no son capaces de girar sobre si mismo para ver todo el paisaje.

Llevaba tiempo, sin escribir nada y supongo que volveré a pasar bastante tiempo sin hacerlo.
Y hay una cosa que me resulta curiosa, echo de menos, la participación de una serie de personas, tanto en el foro como en sus blogs. Y me llama la atención, que sean personas que poco a poco han dejado de escribir o se han marchado o marchitado por voluntad propia.

Porque las lapidaciones que ha habido, en general, han sido porque hay quien busca ser lapidado como un mártir, por defender a capa y espada su postura como la única valida. Como la SUPREMA VERDAD ABSOLUTA.
Y no, no me parecen bien esas ejecuciones, creo que hay que dar un ejemplo de respeto. Y si te cansas de leer las aberraciones de determinados personajes, pues se deja de leerlos y punto. O por lo menos se deja de contestarles, que más da, si no vas a conseguir nada más que cabrearte.

En fin, que este es mi particular punto de vista y que quizás este equivocado y exista una manera perfecta de vivir el BDSM, y no sea la que le da la felicidad a cada uno disfrutándolo a su manera.

Un cordial saludo y mil gracias, a quien haya tenido tiempo y paciencia para tragarse este ladrillo.


Lord Wunjo.
   
Publicado el 29 de mayo de 2009 en mi blog de someteme.

No hay comentarios: